La compañía de teatro La Calòrica aporta una mirada ácida sobre la crisis climática
En «De qué hablamos mientras no hablamos de toda esta mierda», el espectador asiste al Congreso Catalán de Negacionistas Climáticos, donde una experta internacional (interpretada por Mònica López) nos habla de la violencia infantil que ejercemos cuando trasladamos los miedos e incertidumbres del cambio climático a las generaciones que más sufrirán sus consecuencias. Después, a esta perspectiva, se añadirán las visiones contrapuestas (o no tanto) de la iglesia y la sociología, que harán enrojecer las mejillas de más de uno, y no de alegría.
Las contradicciones de hitos como la Cumbre del Cambio climático (COP 25) como telón de fondo – que representan el cruce de intereses de las grandes compañías, lobbies y medios de comunicación – aflorarán como la mierda, a través de una trama doble que irá tomando forma a lo largo de la obra. La mierda que se encuentra bajo el local de ensayo de la compañía, que amenaza los cimientos del edificio y hace estallar la comunidad vecinal, es literal. Pero al mismo tiempo es también una gran metáfora de las cloacas de nuestro sistema, y de cómo se hunden los pilares de la sociedad occidental. En ambos casos aparece una acumulación de basura que se encuentra oculta (pero no muy adentro), hace un intenso mal olor y, al final, no se puede esconder; acaba siendo tan evidente que es imposible no darse cuenta.
Esta pieza de La Calòrica viaja, con éxito de público, por todas partes. Con humor ácido y crítica al status quo de la sociedad actual, nos lleva a reflexionar sobre el mundo que nos rodea y sobre la crisis climática en la que estamos inmersos. Actuar, tanto en la vida como en el teatro, nunca había sido tan esencial. ¡Aún estás a tiempo!
La obra de La Calòrica se representará el viernes 28 de mayo en el Teatro Kursaal de Manresa.
